El problema de los purines generados por las granjas porcinas hace que surjan proyectos e iniciativas para tratar no solo de reducir su impacto, sino también para revalorizarlo y convertir algo que en un principio es un desecho en un subproducto beneficioso y que permita cierto ahorro para las explotaciones. Es el caso de Depuporc, empresa recientemente instalada en CEEIARAGON.
Las casi 4.500 explotaciones y las cerca de ocho millones de cabezas de ganado porcino existentes en Aragón colocan a este tipo de ganado a la cabeza del sector en la Comunidad. Se trata, sin duda, de un sector en expansión que, si bien tiene un impacto positivo innegable, tiene también aspectos que hay que mejorar. Uno de ellos es la gestión de los purines producidos por estos animales.
Depuporc es una empresa nacida en 2017 con el objetivo de desarrollar y explotar un sistema patentado de gestión de purines basado en dos procesos: la electrocoagulación y la electrooxidación. Recientemente, y dado que ya va a comenzar la fase de comercialización, esta empresa innovadora se ha instalado en el Centro Europeo de Empresas e Innovación de Aragón (CEEIARAGON), vivero de empresas cuyo objetivo es apoyar la creación y el desarrollo de proyectos empresariales de carácter innovador dentro del sector industrial o de servicios avanzados para empresas que creen riqueza y empleo en Aragón.
«El sistema tiene como principal objetivo la reducción del nitrógeno presente en las deyecciones ganaderas y por lo tanto la reutilización del líquido resultante (agua), una vez separado del sólido y posteriormente tratado, que puede reutilizarse por riego, limpieza de las explotaciones e incluso puede verterse al cauce siempre y cuando se haga dentro de los parámetros permitidos«, explica Eduardo Chopo, director técnico y socio fundador de Depuporc.
«Por lo tanto, el efecto medio ambiental de la aplicación del sistema es global, ya que reduce el impacto de la huella hídrica del establecimiento, evita la saturación de los campos de cultivo, evita la contaminación de acuíferos y reduce la emisión de gases de efecto invernadero», añade Chopo.
Se trata, además de un sistema que ha despertado el interés de empresas internacionales. Depuporc trabaja desde 2017 con un «socio tecnológico», se trata la compañía norteamericana Origin Clear Technologies. En diciembre del pasado año ambas firmas suscribieron un acuerdo para la comercialización del sistema de Depuporc en Estados Unidos, así como en los países de influencia de los clientes de esta empresa. «Esto fue un verdadero punto de inflexión en nuestro modelo de negocio», señala Eduardo Chopo.
El funcionamiento de este sistema puede comprobarse ‘in situ’ en la planta piloto que Depuporc tiene en la provincia de Huesca. Esta instalación, construida en 2019 en una explotación ganadera ya existente. Esta planta es capaz de gestionar 30 metros cúbicos de purines al día, lo que equivale a lo generado por una explotación de unos 4.000 cerdos de engorde. Los resultados de esta planta, certificados el pasado diciembre por un laboratorio independiente, certifican reducciones de un 94% de nitrógeno, una reducción de nitrógeno del 94% y una reducción de DQO (los componentes orgánicos) y fósforo del 99%.
En esta planta, los clientes potenciales pueden comprobar en condiciones de trabajo, el correcto funcionamiento del sistema y cómo puede impactar en su explotación. De hecho, hace unas semanas visitó la planta una delegación del Ministerio de Agricultura de Corea del Sur, «un país con la mitad de superficie que España y una densidad de población muy similar, por lo que los problemas de la ganadería intensiva son muy relevantes. El encuentro fue muy positivo para ambas partes», explica el director técnico de Depuporc.